En los próximos días entrará en funcionamiento el primero de los tres pozos del Proyecto Fénix, desarrollado por TotalEnergies, Wintershall y PAE. Este yacimiento, ubicado en el Mar Austral, espera aportar el 8% de la producción nacional de gas, representando un avance crucial para el ahorro de dólares en Argentina.
El Proyecto Fénix se apronta a comenzar la producción en un yacimiento de gas offshore en el Mar Austral, a 60 kilómetros de la costa de Tierra del Fuego, marcando un hito en la industria energética de Argentina. Este proyecto ha sido impulsado por un consorcio de empresas internacionales: TotalEnergies, Wintershall Dea, y Pan American Energy (PAE), con una inversión total de 700 millones de dólares, inversión que esperan recuperar en 4 años.
Estas compañías, con vasta experiencia en la explotación de recursos en aguas profundas, han unido fuerzas para desarrollar este yacimiento, cuya importancia radica en su capacidad para aportar hasta 10 millones de metros cúbicos de gas diarios al mercado argentino, lo que cubriría cerca del 8% de la demanda nacional.
Empresas Involucradas:
- TotalEnergies: Con sede en Francia, es una de las principales compañías energéticas del mundo, con operaciones en más de 130 países. Su experiencia en exploración y producción de hidrocarburos en entornos complejos ha sido clave en la ejecución del Proyecto Fénix. TotalEnergies ya cuenta con una presencia significativa en Argentina, siendo uno de los principales actores en la extracción de gas y petróleo en el país.
- Wintershall Dea: Esta empresa alemana, especializada en la exploración y producción de petróleo y gas natural, aporta su expertise en la gestión de proyectos de alta complejidad técnica, como es el caso del Fénix. Con operaciones en Europa, Rusia, América Latina y el Medio Oriente, Wintershall Dea ha consolidado su posición como uno de los principales operadores de yacimientos en aguas profundas.
- Pan American Energy (PAE): Una de las mayores productoras de hidrocarburos de Argentina, PAE es una empresa controlada por BP (British Petroleum) y Bridas Corporation. Su participación en el Proyecto Fénix refuerza su compromiso con el desarrollo energético del país, donde ya opera en diversos yacimientos clave, incluyendo Cerro Dragón, uno de los mayores campos de petróleo y gas de Argentina.
Detalles Técnicos y Económicos:
El yacimiento se ubica en el Mar Austral, una zona conocida por sus condiciones climáticas extremas y su gran profundidad, lo que añade complejidad al proyecto. Para llevar a cabo la explotación, se ha construido un gasoducto submarino de 35 kilómetros, que conecta el yacimiento con la plataforma Vega Pléyade. Esta infraestructura, también operada por TotalEnergies, juega un papel crucial en el procesamiento del gas extraído antes de su distribución en el mercado local.
El gas producido en Fénix es clave para Argentina, no solo por su volumen, sino por su capacidad de reducir la dependencia de las importaciones de gas natural licuado (GNL), que representan una carga significativa para la balanza de pagos del país. Se estima que la operación del yacimiento permitirá ahorrar millones de dólares anuales en importaciones, liberando recursos que pueden ser reinvertidos en otras áreas de la economía.
A largo plazo, el Proyecto Fénix tiene una vida útil estimada de 15 años, durante los cuales se espera que su producción no solo contribuya al autoabastecimiento energético de Argentina, sino que también impulse el desarrollo económico de Tierra del Fuego. La región se beneficiará de la creación de empleo y la generación de infraestructura, fortaleciendo su economía local.
Impacto en la Balanza Comercial:
El proyecto tiene el potencial de mejorar significativamente la balanza comercial de Argentina. Al reducir la necesidad de importar gas, se espera que el país logre un ahorro sustancial en divisas, lo que podría contribuir a estabilizar la economía en un contexto de alta volatilidad. Además, existe la posibilidad de que el excedente de gas producido sea exportado a mercados vecinos, lo que generaría ingresos adicionales y fortalecería la posición de Argentina como exportador energético en la región.
