Pese a que se espera que la inflación fuera decreciendo, en agosto se registró una suba inesperada. Desde el Instituto de Estadísticas y Censos (Indec) se informó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue del 4,2%. En los últimos doce meses acumuló un 236,7%. Te mostramos cómo afecto al Alto Valle.
El relevamiento de Estadísticas y Censos de la provincia informó que en Neuquén el promedio mensual fue del 5%, mientras que en julio fue del 5,2%, la de junio de 6,5% y la de mayo 4,9%. Y en la vecina provincia, la Dirección de Estadística y Censos de Río Negro anunció que el promedio mensual fue del 5,10%, un poco más alto que en Neuquén, y que midió subas del 44,12% en el último semestre y del 259,9% en la comparación interanual. La región con mayor incremento fue el Noroeste del país, con un promedio del 5%, y en segundo lugar se ubicó la Patagonia con un promedio del 4,6%. Los rubros más afectados por las subas fueron educación con el 11%, servicios recreativos y culturales con el 9,3%, bebidas no alchólicas y cuidado personal con el 2,4%.
El resultado de agosto es apenas superior al de julio, cuando el IPC mostró un aumento del 4%. Sin embargo, pese a las expectativas iniciales de una desaceleración, los precios continúan mostrando resistencia a la baja, principalmente debido al comportamiento de ciertos sectores clave, como alimentos y bebidas. Según la consultora EcoGO, este rubro, que tiene un peso considerable en el índice general, registró una suba del 3,8%, similar a la de Orlando Ferreres & Asociados y C&T, que también estimaron aumentos cercanos al 4%.
Uno de los factores que influyeron en esta resistencia a una baja más rápida es la evolución de los precios regulados, que si bien han tenido ciertos ajustes menores en los últimos meses, siguen siendo un ancla inflacionaria. Por su parte, el presidente del Banco Central, Vladimir Werning, había señalado días atrás que se esperaba un registro cercano al 3,5% para septiembre, ayudado por la reducción del impuesto PAIS en 10 puntos porcentuales. Sin embargo, esta baja no ha sido suficiente para adelantar una desaceleración significativa.
En las últimas semanas, distintos relevamientos privados y proyecciones oficiales apuntaban a un escenario inflacionario en torno al 4%, una tendencia que se viene manteniendo de forma sostenida desde mayo. Desde el Ministerio de Economía, el ministro Luis Caputo reconoció que la inflación “todavía no cede al ritmo esperado”, aunque destacó que se trata del dato más bajo desde enero de 2022, cuando la variación mensual fue del 3,9%.
Pese a los esfuerzos del actual gobierno nacional los golpes al bolsillo parecen no ceder. Y en nuestra región los índices superan la media del país. Según Caputo también subrayó que la política monetaria de “emisión cero”, junto con la baja progresiva del impuesto PAIS, permitirá avanzar en la estabilización de los precios en los próximos meses. “Estamos trabajando para lograr una convergencia inflacionaria hacia la meta cambiaría, lo cual nos permitirá eliminar las restricciones cambiarias de manera definitiva”, sostuvo Caputo en una reciente entrevista radial.