La familia del comerciante acusado de balear a un joven de 15 años en el contexto del robo de su comercio en Cayastá y Avenida del Trabajador, se defiende de la denuncia y asegura que no tuvieron relación con el hecho.
Una comerciante vecina habló en defensa de su colega y explicó que el día de los robos estuvieron recorriendo la zona y que no se anoticiaron de una persona herida, «como comerciantes nos estamos organizando porque no puede ser que ella tenga que cerrar su fuente de trabajo», remarcó. Indicó también que robaron papelillos, cigarrillos y zapatillas, en el local que es del rubro regalería.
Por otra parte, la pareja del acusado dijo que están sufriendo represalias por la acusación y afirmó que el joven baleado estaba robando y no «se encontró con la caja de zapatillas», como dicen. Además, aseguró que recibieron amenazas de la mamá del herido.