Un incidente de intoxicación masiva en un galpón de empaque en Vista Alegre dejó al menos 20 trabajadores afectados, según confirmó el jefe de los Bomberos de Centenario, Patricio Álvarez. El episodio ocurrió debido a una fuga de cloro granulado, utilizado como agente de sanitización, en un espacio sin ventilación adecuada y con condiciones laborales precarias.
El hecho se registró el martes pasado, alrededor del mediodía, cuando cinco trabajadores llegaron al hospital de Centenario con síntomas de intoxicación, lo que encendió las alarmas. Más tarde, la cifra aumentó a 13 personas atendidas inicialmente, pero durante la tarde se sumaron más afectados.
Patricio Álvarez destacó que este no es el primer incidente en el mismo galpón. Anteriormente, una fuga de amoníaco ya había puesto en riesgo la salud de los empleados, evidenciando una falta de protocolos y de control en la empresa responsable.
“El ambiente estaba cerrado, sin ventilación, y había trabajadores en contacto directo con cloro granulado, una sustancia que al combinarse con agua puede generar gases irritantes para las vías respiratorias y provocar reacciones graves en personas con problemas respiratorios preexistentes”, explicó Álvarez en entrevista con Radio 7.
Pese a la gravedad de la situación, los responsables del galpón no desalojaron a los empleados ni activaron un protocolo de emergencia. Según Álvarez, incluso pidieron a los bomberos que minimizaran la situación para evitar problemas legales.
El incidente obligó al cierre temporal de la guardia del hospital de Centenario, que quedó fuera de servicio debido al ingreso masivo de intoxicados. La gravedad de estos episodios subraya la urgente necesidad de una intervención estatal para fiscalizar las condiciones laborales y las instalaciones de este tipo de empresas.
Los bomberos detectaron que el escape de cloro se originó en un compresor defectuoso, situación que era conocida por la empresa pero no fue reparada. Además, el galpón carece de sistemas de ventilación adecuados, y los empleados manipulaban también un pegamento tóxico sin protección.
Si bien no hubo víctimas en estado crítico, los trabajadores afectados presentan síntomas como irritación respiratoria, ocular y dérmica, además de problemas gastrointestinales, que seguirán siendo monitoreados por personal médico.
Este incidente ha encendido el debate sobre la falta de controles y la responsabilidad empresarial, exigiendo que las autoridades locales y provinciales tomen medidas inmediatas para prevenir futuras tragedias laborales.