El mediodía del 19 de diciembre fue testigo de un devastador incendio en el Barrio Julio Gay de San Martín de los Andes. Según informó Sebastián Torcivia, director de Protección Civil, el siniestro consumió por completo una vivienda y afectó parcialmente otras dos, dejando un saldo de seis personas hospitalizadas por inhalación de monóxido de carbono. Afortunadamente, no se registraron víctimas fatales.
Un incendio de difícil acceso
El barrio, ubicado en una zona montañosa de difícil acceso, presentó grandes desafíos para las tareas de contención. “Es un lugar complicado para llegar, tanto por la ubicación del barrio como por su topografía,” explicó Torcivia. El incendio también alcanzó árboles y vegetación cercana, lo que complicó aún más las tareas.
El operativo contó con la participación de seis dotaciones de bomberos, apoyo de Protección Civil, el Sistema Provincial de Manejo del Fuego y camiones cisterna del municipio. El viento, calificado por Torcivia como “el enemigo número uno” en estos casos, agravó la situación.
Asistencia a los afectados
Tres personas debieron ser evacuadas: un hombre mayor de 70 años y una pareja joven. Según informó Protección Civil, estas personas serán alojadas temporalmente en casas de familiares. Además, se brindó asistencia inmediata con colchones, ropa y zapatillas para las familias afectadas.
“Es dramático ver cómo estas familias lo pierden todo. Estamos trabajando junto con Desarrollo Social para cubrir sus necesidades más urgentes,” agregó Torcivia.
Causa del incendio bajo investigación
Aunque aún no se han confirmado las causas, las primeras pericias apuntan a un posible problema en una salamandra como origen del fuego. “Estamos esperando un análisis más detallado para determinar con exactitud qué ocurrió,” señaló el director.
Planificación urbana y riesgos
El siniestro expuso una vez más la falta de planificación urbana en zonas de alto riesgo. Torcivia indicó que el Barrio Julio Gay, al igual que otros sectores de San Martín de los Andes, ha crecido sin control en laderas montañosas propensas a deslizamientos e incendios. “Este barrio fue pensado para unas 20 mil personas, pero hoy San Martín tiene alrededor de 50 mil habitantes,” explicó.
Prevención y conciencia
Protección Civil y otras instituciones realizan campañas de concientización sobre los riesgos de vivir en zonas forestales, además de promover prácticas de prevención de incendios. Sin embargo, Torcivia lamentó que aún haya comportamientos imprudentes como encender fuego o fumar en lugares prohibidos. “Es un trabajo arduo, pero debemos redoblar esfuerzos, especialmente en verano, cuando el calor y el viento aumentan los riesgos,” concluyó.
