El índice S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cayó un 5%, situándose en 1.430.000 puntos a las 11:15 horas. Esta marcada venta de activos bursátiles impulsó el alza del riesgo país, que ascendió 52 unidades, alcanzando los 1.608 puntos básicos, su nivel más alto desde el 14 de marzo.
Los bonos soberanos en dólares retrocedieron más de un 1%, según la referencia de los Globales con ley extranjera en Wall Street. Al mismo tiempo, el dólar en las plazas cambiarias alternativas, bajo estrictos controles, mostró una recuperación significativa. El MEP y el “contado con liqui” cayeron un 2%, situándose por debajo de los $1.300.
El Ministro de Economía, Luis Caputo, explicó que si el Banco Central de la República Argentina (BCRA) comprara dólares en el Mercado Único y Libre de Cambio (MULC), la emisión de pesos sería esterilizada con la venta de dólares equivalentes en el mercado bursátil de Contado con Liquidación (CCL). Esta medida busca controlar la emisión monetaria y estabilizar la economía.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, señaló que “la profundización del programa monetario contribuirá al proceso de desinflación y se estima que el BCRA deberá absorber unos 2,5 billones de pesos adicionales a lo que se absorbe por superávit primario”. Además, indicó que la reducción del impuesto inflacionario ayudará a reducir la brecha cambiaria, facilitando la eliminación de las restricciones de cambio de manera ordenada.
En otro intento por tranquilizar a los inversores, el Gobierno anunció que procederá a comprar al BCRA las divisas necesarias para hacer frente al pago total de intereses de los bonos Globales y Bonares con vencimiento en enero de 2025. El Grupo SBS comentó que la decisión está orientada a contener expectativas respecto al aumento de la brecha cambiaria, destacando que el BCRA es estacionalmente vendedor neto en el MULC en los segundos semestres de cada año.
La situación financiera argentina sigue siendo delicada, con las medidas del Gobierno buscando estabilizar una economía golpeada y mantener la confianza de los inversores en un contexto de alta volatilidad y presión cambiaria.