El Servicio Meteorológico Nacional ha actualizado la alerta meteorológica para la provincia de Neuquén al reducir su nivel de «naranja» a «amarillo». Esta decisión se tomó tras un monitoreo exhaustivo que comenzó con una alerta roja debido a fuertes lluvias previstas para las zonas cordilleranas del oeste de la provincia.
La reducción en la intensidad de la alerta se comunicó a las 6:15 de la mañana, y según los informes de la Unidad de Información de Alerta Temprana, hasta el momento no se han registrado evacuaciones ni afectaciones significativas. Las autoridades provinciales y locales, en coordinación con el Comité de Emergencias, han estado preparadas para cualquier eventualidad, asegurando la asistencia y la logística necesarias.
Las condiciones meteorológicas actuales muestran nubosidad variable y lluvias persistentes en varias regiones, con neblina en el sur y lluvias de intensidad variada en el centro y norte de la provincia. Las medidas preventivas y la coordinación de los equipos en terreno han sido fundamentales para minimizar los posibles impactos del temporal.
El jefe de Defensa Civil de Neuquén, Carlos Cruz, destacó la importancia de la planificación y la preparación ante situaciones climáticas adversas. Equipos locales y provinciales han estado desplegados estratégicamente en las zonas más vulnerables, listos para actuar en caso de emergencia.
Finalmente, las autoridades continúan recomendando precaución al transitar por las rutas, especialmente en áreas con bancos de niebla y lluvias intermitentes. La situación de los pasos fronterizos se mantiene operativa, y se espera que esta tendencia continúe, asegurando que la población pueda movilizarse con seguridad.