Brasil registra el mayor déficit externo en cinco años en 2024

El déficit externo de Brasil alcanzó 55.960 millones de dólares en 2024, más del doble que en 2023, impulsado por el crecimiento económico y menor saldo comercial. Déficit más alto desde 2019 Según el Banco Central de Brasil, el país registró un déficit de 55.960 millones de dólares en 2024, la cifra más alta en cinco años. El saldo negativo […]

El déficit externo de Brasil alcanzó 55.960 millones de dólares en 2024, más del doble que en 2023, impulsado por el crecimiento económico y menor saldo comercial.

Déficit más alto desde 2019

Según el Banco Central de Brasil, el país registró un déficit de 55.960 millones de dólares en 2024, la cifra más alta en cinco años. El saldo negativo superó ampliamente al de 2023, cuando se ubicó en 24.510 millones de dólares, y estuvo cerca del registrado en 2019, de 65.000 millones de dólares.

Factores que explican el déficit

El Banco Central explicó que el déficit se debió al crecimiento económico, que incrementó la demanda de bienes y servicios externos. En 2024, la balanza comercial mostró una fuerte contracción, pasando de un saldo positivo de 92.270 millones de dólares en 2023 a 66.200 millones. También se deterioró la cuenta de servicios, con un déficit de 49.700 millones de dólares, frente a los 39.800 millones de 2023.

En diciembre de 2024, las cuentas externas reportaron un déficit mensual de 9.030 millones de dólares, un aumento significativo respecto a los 5.600 millones de diciembre de 2023.

Aumento de las inversiones extranjeras

En contraste, las inversiones extranjeras directas crecieron un 13,8% en 2024, alcanzando 71.100 millones de dólares, el nivel más alto desde 2022. Según el Banco Central, este flujo fue suficiente para financiar el déficit externo total del año.

Reservas y perspectivas

A pesar del déficit, Brasil cuenta con reservas internacionales de 339.000 millones de dólares, las más altas de la región. Sin embargo, especialistas advierten que será crucial monitorear las dinámicas externas en 2025 para evitar nuevos desequilibrios en la economía.

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