Norma, vecina de Mallín Ahogado, relató a Noticias 7 el violento episodio que se vivió en la Comisaría de El Bolsón, donde un grupo de personas armadas con rebenques y machetes a caballo irrumpió para amedrentar a quienes pedían la liberación de un joven detenido en el marco de la investigación por los incendios en la zona.
El jueves 30 de enero, un incendio en Mallín Ahogado movilizó a brigadas comunitarias, voluntarios y al Estado para combatir el fuego. Sin embargo, al día siguiente, el fiscal Arrien ordenó la detención de tres personas, entre ellas un joven muy conocido y querido por los vecinos, lo que generó una manifestación pacífica en la comisaría.
Violencia y amenazas ante la mirada de la policía
Lo que comenzó como un reclamo pacífico se tornó en un escenario de terror cuando un grupo de personas a caballo, armadas con machetes y rebenques, llegó al lugar. “Nos amenazaron, nos insultaron y la policía solo hizo un cordón, pero no intervino para frenar la violencia”, relató Norma.
La situación se tornó aún más grave cuando los agresores ingresaron con los caballos al patio de la comisaría y golpearon a un joven, quien terminó con heridas en la cabeza. Los manifestantes buscaron resguardo dentro del edificio, pero la policía, en lugar de protegerlos, «los expulsó a la calle, dejándolos a merced de los atacantes».
Un grupo con antecedentes de violencia
Según denunció la vecina, este grupo no es la primera vez que actúa con impunidad en la región. “Son los mismos que han atacado en otras ocasiones, como en 2021 cuando asesinaron a Elías Garay Cañicol o cuando intentaron impedir el ingreso al Lago Escondido”, afirmó.
La policía argumentó que no podía garantizar la seguridad de los detenidos ni de los manifestantes, por lo que trasladaron a los jóvenes a Bariloche. “Los acusan sin pruebas concretas, mientras que los que estaban armados en la comisaría ni siquiera fueron demorados”, denunció Norma.
Finalmente, la comunidad espera una respuesta de la justicia, mientras que el fiscal Arrien, quien debía intervenir en el conflicto, nunca se hizo presente en el lugar.