Preocupación de parte de una madre y su hijo con discapacidad para que pueda acceder a las clases de música en la ciudad. Reclama que la institución pública no cuenta con los recursos necesarios para que los estudiantes puedan trasladarse con libertad por el establecimiento.
En diálogo con Radio 7, María Castro, mamá de Pedro de 8 años, quien padece de una encefalopatía crónica no evolutiva (ECNE), expresó que vienen acarreando hace varios años con la problemática en la escuela de arte y música donde “el ascensor durante el año funciona pocas veces” y a su hijo lo tiene que trasladar en brazos por las escaleras.
Esta semana comenzaron las actividades dentro de la institución de arte y música y vuelven a enfrentar los mismo inconvenientes. “Algunas actividades pedimos que las realicen en planta baja para poder acceder, no solo es por el caso de mi hijo, también los adultos que no pueden subir escaleras”.
Si bien el año pasado se realizaron los reclamos a las autoridades competentes y por medio del Consejo de Educación se logró solucionar el inconveniente, en el inicio de clases de este año vuelve a persistir el mismo problema, “es un ascensor viejito y se complica bastante”.
A la institución musical acuden niños, jóvenes y adultos con distintas problemáticas: motrices en sillas de ruedas o muletas, no videntes y con movilidad reducida.