
En un marco de armonía entre la distintas fuerzas políticas, la Cámara de Diputados le rindió un sentido homenaje al Papa Francisco, el líder religioso que murió ayer en Roma a los 88 años después de haber marcado una época de profundas reformas en la Iglesia Católica.
La noticia del deceso de Jorge Bergoglio pocas horas después de haberse dado su último baño de multitudes en El Vaticano durante la ceremonia de Pascuas, paralizó al mundo entero y el Congreso argentino no fue la excepción.
En línea con el duelo nacional por siete días que decretó el Poder Ejecutivo, la Cámara baja suspendió toda la actividad programada para la semana, que incluía para este martes la interpelación de ministros nacionales por el cripto escándalo Libra.
A última hora de la tarde del lunes, en un cónclave de jefes de bloque que tuvo lugar en el despacho del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, se resolvió que era prudente dejar stand by hasta la semana próxima todas las reuniones de comisión, y convocar de urgencia a una sesión especial para rendirle honores al Papa argentino.
La sesión duró cuatro horas y estuvieron presentes los diputados de todas las fuerzas políticas, con la salvedad del Frente de Izquierda, que prefirió dejar las bancas vacías en el recinto, para ser coherente con su postura histórica anticlerical.
Luego de que el diputado nacional de Unión por la Patria y amigo del Papa Eduardo Valdés izara la bandera, se iniciaron los discursos, en los que predominó un tono moderado, sin dar lugar a la chicana entre las distintas tribus políticas.
La única discusión que se planteó fue en torno al dilema que deberá resolver Menem sobre si se justifica financiar una delegación especial de diputados a Roma para participar del funeral del Papa el próximo sábado.
Mientras que la diputada nacional de Democracia para Siempre Danya Tavela pidió a sus pares que “no anden garroneando un viaje para ir a Roma”, el presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, le sugirió al riojano que “haga los esfuerzos” para que una comitiva esté presente en el funeral.
Los discursos
El primer orador fue el diputado nacional de la UCR Julio Cobos, quien destacó la impronta «reformista» que el papa Francisco le estampó a su gestión para “adaptar a la Iglesia a los cambios sociales y culturales que transitaba la humanidad y el mundo”.
El ex vicepresidente planteó que Jorge Bergoglio “era un hombre de mucha sensibilidad social y que luchaba por la paz”.
Por su parte, Valdés explicó que el Papa “sentía que para venir a la Argentina tenía que ser prenda de unidad”, situación que nunca se produjo por la persistencia de la grieta política.
El ex embajador en la Santa Sede destacó el acuerdo político entre las distintas fuerzas de la Cámara de Diputados para deponer las diferencias políticas en pos de rendir honores al Papa.
«Hoy lo has logrado Francisco. Acá esta la Cámara de Diputados, con acuerdo de todos los presidentes de bloque, que han decidido parar la contienda política y rendirte un respetuoso homenaje”, ponderó.
A su turno, la diputada nacional de La Libertad Avanza Marcela Pagano destacó que Francisco “siempre estuvo del lado de los descartados” y que “nunca se arrodilló ante el poder”.
“Desde el barrio de Flores al Vaticano, con algunas escalas, pero nunca olvidó de donde venía y para quién ejercía su vocación”, ponderó.
En otro pasaje de su discurso reconoció que “supimos tener diferencias los argentinos en torno a su figura, como las hay en todas las familias”.
En tanto, el diputado nacional de Unión por la Patria Santiago Cafiero afirmó el Papa Francisco “fue la voz más potente de los que no tienen voz”.
En tanto, el ex jefe de Gabinete y ex canciller le pidió “perdón” a Bergoglio en nombre de la clase política por no haber sabido “construir un puente” para que “volviera a su tierra” durante sus años de papado.
La diputada nacional de la Coalición Cívica Paula Oliveto sostuvo que el mejor homenaje al Papa Francisco es trabajar para que los pobres sean de clase media».
El presidente del bloque del PRO, Cristian Ritondo, por su parte, destacó la figura del Papa, de quien dijo que “dejó una huella imborrable en la historia de la humanidad”.
El jefe del bloque de diputados nacionales de Democracia para Siempre, Pablo Juliano, definió a Francisco como un “profeta criollo” que “enseñó a perdonar” y a “construir diálogo”.
La diputada de la UCR Natalia Sarapura subrayó que Bergoglio “fue el papa que pidió perdón en nombre de la Iglesia a los pueblos indígenas, reconociendo el genocidio».
Con un discurso que por momentos abusó del registro religioso en un ámbito laico como es el Congreso de la Nación, el diputado de La Libertad Avanza Santiago Santurio aseguró que el Papa Francisco fue «disruptivo» y destacó que “siempre bregaba por la unión de los hermanos”.
El presidente del bloque de la UCR, Rodrigo de Loredo, se congratuló con el hecho de que “la Iglesia católica haya escogido ser liderada por un cura de un recóndito y sureño país que cuenta con el 0,5 % de la población mundial, la Argentina”.
La diputada de Unión por la Patria Natalia Zaracho, referenciada con Juan Grabois, recordó que antes de ser Papa, Bergoglio “siempre estuvo al lado del que más necesitaba y eso no lo cambió nunca”.
“Estaba al lado de los jubilados, al lado de los pibes que están sufriendo consumo en los barrios populares, estaba al lado de los excluidos”, recordó quien antes de ser diputada nacional había sido cartonera.
“Y el primer mensaje que dio para nosotros fue muy importante el día que asumió, porque en la primera fila había un pobre, un cartonero, un compañero, que se llama Sergio Sánchez, que fue fundador también del Movimiento de Trabajadores Excluidos, que estuvo en la primera fila con gente muy importante, con líderes mundiales. Ese fue un mensaje del Papa también, del Papa que no se olvidó nunca de dónde salió”, relató.