Grave accidente protagonizado por una menor en motocicleta

Un incidente alarmante se produjo en la calle Necochea 2029 cuando una joven de solo 14 años que manejaba una motocicleta de 110 cc colisionó con un Volkswagen Gol. Testigos presenciales, entre ellos el movilero Rigo Castaño, relataron la situación caótica que se desarrolló tras el accidente, que dejó a la menor gravemente herida en […]

Un incidente alarmante se produjo en la calle Necochea 2029 cuando una joven de solo 14 años que manejaba una motocicleta de 110 cc colisionó con un Volkswagen Gol. Testigos presenciales, entre ellos el movilero Rigo Castaño, relataron la situación caótica que se desarrolló tras el accidente, que dejó a la menor gravemente herida en la pierna.

Aproximadamente 20 minutos después del choque, Castaño llamó a la ambulancia debido a la gravedad de la lesión, que dejó a la joven con una herida abierta en el muslo. La situación se tornó tensa cuando un familiar de la víctima comenzó a arrojar piedras al vehículo de la mujer involucrada en el accidente, lo que complicó aún más la escena. A pesar de la gravedad del incidente , tanto la policía como la ambulancia tardaron en llegar al lugar.

La demora en la llegada de los servicios de emergencia fue notable, ya que la comisaría más cercana se encuentra a solo cinco cuadras del lugar. Según Castaño, la ambulancia llegó finalmente, pero la policía aún no se había presentado. «El ambiente es de total tensión», afirmó el movilero, quien también expresó su preocupación por la salud de la joven, sugiriendo que la herida podría comprometer su arteria femoral.

Mientras la ambulancia atendía a la menor, los testigos intentaban controlar la situación que se había convertido en un verdadero caos. La implicación de una menor al volante genera interrogantes sobre la responsabilidad de los padres y la legalidad de la situación. Castaño destacó que no hay duda de que el incidente refleja una negligencia grave por parte de los adultos responsables.

En medio del desorden, los testigos también se preocuparon por la seguridad de la joven. «No podía permitir que la subieran al auto antes de que la evaluaran adecuadamente», explicó Castaño, quien intentó evitar que la situación se agravara aún más. La herida en la pierna, que requeriría atención inmediata, era un recordatorio de los peligros de permitir que un menor maneje un vehículo.

El accidente no solo resalta la necesidad de educación vial , sino que también pone de manifiesto la importancia de una respuesta rápida y eficaz de los servicios de emergencia. Minutos después la victima fue estabilizada y llevada al hospital Castro Rendon.

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