El Sindicato de Guardavidas de Neuquén (SIGUNE) ha declarado una medida de fuerza en reclamo de recomposición salarial, lo que podría afectar el operativo de seguridad en los balnearios de la ciudad. Ante esto, el Municipio solicitó la conciliación obligatoria para evitar que la protesta impacte en la seguridad de los bañistas.
El subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio, aseguró que los aumentos salariales ya fueron acordados con el Sindicato de Trabajadores Municipales de Neuquén (SITRAMUNE) y que no pueden volver a discutirse. “La pauta salarial ya se selló en noviembre y prevé un nuevo aumento en marzo”, afirmó.
A pesar de esto, Baggio reconoció que otros aspectos laborales están en discusión, como recategorizaciones y la regulación de horas extras. Aseguró que hay «buen ánimo» para alcanzar un acuerdo y que el Municipio está esperando una respuesta del sindicato.
Desde el Municipio cuestionaron el cambio de postura del sindicato en el último mes. “Hace poco estaban presentando la nueva indumentaria y equipamiento, ahora están en conflicto”, indicó Baggio, quien agregó que no comprenden del todo la situación interna de SIGUNE.
El funcionario destacó que el operativo de seguridad acuática de la ciudad es de «excelencia«, con 163 guardavidas, motos de agua, cuatriciclos, canoas y botiquines. Aseguró que las condiciones laborales han mejorado y que la extensión de la temporada es un beneficio para los trabajadores y la comunidad.
Sobre el impacto de la medida de fuerza, Baggio aclaró que no todos los guardavidas adhieren al reclamo y que el servicio de seguridad en los balnearios estará garantizado con el personal disponible. “Mucho más de la mitad de los guardavidas seguirán en sus puestos”, sostuvo.
En cuanto a la conciliación obligatoria, el Municipio espera que la respuesta sea inmediata y que la situación se normalice en las próximas horas. La preocupación principal es mantener la seguridad en los balnearios ante las altas temperaturas y la afluencia de bañistas.
La tensión entre SIGUNE y el Municipio sigue en aumento, mientras los guardavidas exigen una respuesta a sus demandas y las autoridades aseguran que las negociaciones salariales ya están cerradas. La resolución del conflicto dependerá de la voluntad de ambas partes para llegar a un acuerdo.