El sindicato de guardavidas de Neuquén mantuvo una reunión clave con el intendente de Plottier para resolver un conflicto laboral que afecta a los servicios de rescate en la región costera. La medida de fuerza, que incluyó a los trabajadores sin uniformes en sus puestos, podría ser levantada según los resultados de este encuentro.

Gastón Gaona, representante del sindicato, explicó a Radio 7 que los guardavidas perciben salarios por debajo del 50% del promedio nacional, lo que motivó los reclamos de recomposición salarial. Además, piden la reincorporación de una compañera despedida y mejoras en las condiciones laborales, como la provisión de equipamiento adecuado.

Entre los puntos críticos, se señaló la falta de elementos básicos para los rescates, como flotadores, handys funcionales y una embarcación en condiciones operativas. Según Gaona, la embarcación actual fue donada por un trabajador hace años y no cumple con los estándares necesarios para realizar operaciones seguras.

En cuanto a la cobertura del servicio, el camping habilitado en Plottier, único en 14 kilómetros de costa, cuenta con apenas siete guardavidas. Gaona destacó que este número es insuficiente, ya que se necesitan al menos ocho personas para garantizar la seguridad. Además, los horarios de cobertura no coinciden con el pico de concurrencia, dejando áreas desprotegidas durante ciertos tramos del día.

El conflicto también incluye el caso de una guardavida despedida, cuya situación fue discutida previamente con el municipio. Aunque se ofreció una disculpa y la posibilidad de reincorporarla, la trabajadora aún evalúa si aceptar debido al trato recibido.

La reunión busca destrabar la situación. Los guardavidas esperan que el intendente ofrezca soluciones concretas para avanzar en la recomposición salarial y el equipamiento necesario. “La lucha no es solo por nosotros, es por la seguridad de quienes disfrutan de las playas”, afirmó Gaona.

Desde el sindicato también señalaron que el déficit de recursos afecta directamente la calidad del servicio. “No podemos trabajar con elementos en mal estado o insuficientes para responder ante emergencias,” agregó el representante.

La comunidad costera de Plottier se ha visto afectada por esta situación, ya que la cobertura de seguridad en playas se ha reducido considerablemente, dejando sectores sin supervisión durante gran parte del día.

El conflicto pone de manifiesto las dificultades de los trabajadores esenciales para obtener condiciones laborales dignas y servicios adecuados. El sindicato confía en que el diálogo con el municipio permita garantizar la seguridad en las playas, especialmente con el inicio de la temporada alta.