La comunidad universitaria se movilizará hoy, a las 18, para rechazar el vaciamiento de la educación pública y visibilizar la crisis que enfrenta la Universidad Nacional del Comahue (UNCo). La concentración tendrá lugar en el playón de la universidad, desde donde los participantes marcharán hacia la Casa de Gobierno.
La marcha, organizada por la Intersindical de Comahue, que incluye sindicatos docentes y la Federación Universitaria del Comahue (FUC), busca llamar la atención sobre las dificultades presupuestarias que afectan a las universidades en el contexto del nuevo proyecto de ley de presupuesto presentado por el gobierno.
El rectorado de la UNCo ha sido tomado desde el lunes por la tarde, en una acción simbólica que no interrumpe las actividades académicas, pero que manifiesta la firme oposición al vaciamiento que intenta implementar el Gobierno Nacional. «Nos quedamos aquí con ganas de seguir cursando y llevando a cabo nuestras actividades», afirmó Joaquín Berrud, presidente de la FUC a Noticias 7.
La toma del rectorado ha estado acompañada de diversas actividades, incluyendo clases abiertas de folklore y otras iniciativas que buscan fomentar la participación estudiantil y visibilizar el conflicto. Estas acciones se enmarcan en un ciclo de clases públicas que continuarán a lo largo de la semana.
La marcha de hoy coincide con el cumplimiento de seis meses desde la primera marcha universitaria federal, que tuvo lugar en abril. «Queremos que la sociedad conozca la situación que estamos atravesando», indicó la secretaria general de ADUNC, Silvia Brouchoud. La movilización de hoy también busca entregar una carta abierta al gobernador Rolando Figueroa, donde se detalla el impacto del presupuesto en la educación superior.
El presupuesto proyectado para 2025 plantea serias preocupaciones, ya que las universidades nacionales han solicitado un total de 7 billones de pesos, mientras que el Gobierno propone destinar solo 3,8 billones, lo que representa una reducción significativa. En el caso específico de la UNCo, se requieren 121 mil millones de pesos, de los cuales el Gobierno solo destinaría 73 mil millones, lo que limita drásticamente las posibilidades de funcionamiento.
Recortes
Los recortes no solo afectan el funcionamiento de la universidad, sino que comprometen la investigación y los proyectos académicos. Este año, la universidad ya ha tenido que suspender subsidios para proyectos de investigación y recortar en servicios de limpieza. «La situación es alarmante, y si el presupuesto para el próximo año es aún menor, podríamos llegar a comprometer incluso el pago de sueldos», advirtió Joaquín.
La respuesta de la comunidad universitaria ha sido clara: continuar con las movilizaciones y buscar alianzas con otros sectores para enfrentar la situación. Se planea una marcha regional en noviembre, que unirá a diferentes universidades de la Patagonia, y una marcha federal a nivel nacional, similar a la que se realizó en octubre.
La comunidad universitaria está decidida a hacer escuchar su voz y exigir que se tomen en cuenta sus demandas en el tratamiento del presupuesto en el Senado. «Necesitamos que nuestros legisladores comprendan la gravedad de la situación», expresó Brouchoud a Noticias 7.
Mientras tanto, el conflicto salarial también permanece latente, con un incremento del 68% anunciado para octubre, pero que aún no se ha concretado. «Seguimos de paro, porque sin una respuesta clara del Gobierno, nuestra situación es insostenible», concluyó Joaquín.
Hoy, la marcha será una oportunidad más para que estudiantes, docentes y trabajadores de la educación se unan en un grito colectivo en defensa de la educación pública y el futuro de las universidades en el país.
