
Pianos de cola y verticales, violines, violas y violoncellos, clarinetes, oboes, saxos, trompetas entre otros instrumentos de viento, instrumentos de percusión en general, guitarras, teclados,
parlantes, amplificadores junto con libros y partituras de la biblioteca, entre otros, sufrieron los embates del temporal que provocó inundaciones en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca y que en este caso afectó al Conservatorio de Música en el que asisten 1.200 alumnos.
Se trata del Conservatorio de Música, que funciona desde el 11 de abril de 1957, el día del aniversario de la ciudad y forma parte del sistema de educación pública de gestión estatal bajo la
la órbita de la Dirección General de Cultura y Educación del gobierno de la provincia de Buenos Aires.
La institución está dedicada a la formación artística y docente, especializada en la disciplina música y cuenta con la sede de la calle Lamadrid al 400, en Belgrano al 400 y una anexo
en una escuela ubicada en la calle General Paz y Dorrego, en un establecimiento educativo que presta las instalaciones.
El temporal provocó anegamiento e inconvenientes varios en la sede de Belgrano que cuenta con 12 aulas como así también en la de la calle Lamadrid, donde sufrió la inundación de un subsuelo y por el cual junto con bomberos trataban de sacar el agua con el aporte
de bombas de achique.
La lluvia que provocó la caída de mas de 400 milímetros junto con el desborde de un arroyo y un canal hizo que se inundaran varios sectores de la ciudad, entre ellos los del conservatorio el
cual contaba con distintos instrumentos que en su mayoría habían sido adquiridos por la cooperativa de la institución educativa.
A casi una semana del trágico temporal, la vicedirectora del establecimiento Rocío Miguelez dijo a la Agencia Noticias Argentinas que «el conservatorio tiene 67 años de historia, cuenta con 200 personas trabajando entre docentes y no docentes y con una matrícula de 1.300 estudiantes, entre ellos niños a partir de los 9 años, jóvenes y adultos quienes estudian formaciones básicas, técnicas y de grado».
«En el conservatorio se enseñan 22 instrumentos musicales y en el caso de la calle Belgrano se dan la mayoría de las clases de instrumentos que fueron afectados porque en la planta baja el agua llegó hasta mas de metro», sostuvo la docente.
En ese sentido dijo que «en la planta baja se arruinó todo, como pianos de cola, verticales, teclados, guitarras, violines, violas, violonchelos, instrumentos de percusión varios, es un
desastre», expresó Miguelez.
La vicedirectora del establecimiento educativo dijo también que «durante el fin de semana de carnaval habíamos tomado el recaudo de poner algunos instrumentos en altura, arriba de escritorios y mesas y mover algunos pianos» debido a que debido al temporal del 2023 los edificios habían sufrido problemas edilicios junto con ingreso de agua por los pluviales y las chapas.
«Por ese motivo salvamos dos contrabajos y dos arpas», comentó al señalar que «no nos imaginábamos que íbamos a tener mas de un metro de agua».
En el caso de la sede de la calle Lamadrid, la que está a pocas cuadras del centro de la ciudad, como la de Belgrano, expresó que «el subsuelo donde hay baño y cocina y elementos mobiliarios se inundó por completo con tres metros de agua, por lo que junto con personal docente y bomberos con bombas se trabajó en terminar de vaciarla, pero eso luego empezó a florar la cloaca, por lo que hoy está clausurada esa sede».
La docente indicó que «tenemos una comunidad educativa de 67 años de historia, egresados, jubilados, gente que pasó por el conservatorio, que no vive acá en el interior del país y hasta en
el exterior se está comunicando para ofrecernos ayuda».
«Hemos perdido un piano de cola que tiene los años del conservatorio, estamos viendo si se pueden recuperar los pianos mas modernos porque las maderas están hinchadas por el agua, esperemos poder recuperar alguno para restaurarlos», sostuvo.
También indicó que «tenemos 1.300 estudiantes que año a año se dedican a estudiar a la música y poner en funcionamiento de nuevo la escuela» al comentar que «este lunes teníamos programada la inscripción en el que estaban preinscriptos 700 para darles sus bacantes por lo que se debió suspender hasta nuevo aviso».
«En estos días que trabajamos intensamente valoramos los que se comunicaron con nosotros para poder poner de nuevo a la música sonar», puntualizó.
Por su parte desde la Asociación Cooperadora Escolar del Conservatorio bahiense señalaron que se están recibiendo donaciones de dinero como recursos físicos y o servicios como instrumentos, mobiliario, partituras y hasta libros del área musical.