Primera cooperativa de trabajo en cárcel de Neuquén: un avance inclusivo

Neuquén se convierte en pionera al poner en marcha la primera cooperativa de trabajo integrada por personas privadas de la libertad en el país. Este innovador proyecto, denominado «Trabun Mapu», comenzará sus actividades en el Pabellón 10 de la Unidad de Detención N°11, donde funcionará como un almacén solidario que proveerá productos de primera necesidad […]

Neuquén se convierte en pionera al poner en marcha la primera cooperativa de trabajo integrada por personas privadas de la libertad en el país. Este innovador proyecto, denominado «Trabun Mapu», comenzará sus actividades en el Pabellón 10 de la Unidad de Detención N°11, donde funcionará como un almacén solidario que proveerá productos de primera necesidad a los internos. La propuesta busca crear un espacio productivo dentro del sistema penitenciario, fomentando el trabajo y la formación cooperativa entre los reclusos.

Ayer, en Casa de Gobierno, se llevó a cabo una reunión clave para avanzar en la implementación de la cooperativa. La defensora de Ejecución, Luciana Petraglia, junto al ministro de Seguridad Matías Nicolini y la ministra de Educación, Soledad Martínez, discutieron los detalles para crear una mesa de trabajo que redactará el protocolo operativo de la cooperativa. Esta instancia de diálogo también contó con la participación del vocal del Tribunal Superior de Justicia, Germán Busamia, y representantes del CEPI, quienes han sido fundamentales en el desarrollo del proyecto.

El origen de «Trabun Mapu» se remonta a 2022, cuando el entonces defensor público Fernando Diez presentó la propuesta tras notar el interés de los internos por generar una iniciativa autogestiva. La cooperativa finalmente obtuvo su matrícula en abril de 2023, marcando un hito en el país, ya que es la primera conformada íntegramente por personas privadas de la libertad.

El objetivo inmediato de la cooperativa es la creación de un almacén solidario que permita el acceso a productos básicos a los internos de la U11. Este almacén, gestionado por los propios reclusos, no solo abastecerá a los demás internos, sino que también permitirá que sus familiares compren productos para ellos, evitando el traslado de grandes cantidades de artículos al penal. La cooperativa recibirá donaciones iniciales que serán utilizadas para adquirir mercadería al por mayor, lo que les permitirá comenzar a generar ingresos de manera sostenible.

El modelo de cooperativa, según explicó Fernando Diez, no solo es una herramienta económica, sino también un enfoque humanista que fomenta la autonomía y la toma de decisiones democráticas dentro del penal. A diferencia de otros programas de reinserción laboral, este proyecto ofrece una alternativa que no depende enteramente del Estado, pero que cuenta con su apoyo para la puesta en marcha. “Es una forma de otorgarles independencia y dignidad a las personas privadas de su libertad, al mismo tiempo que se les educa en los valores del cooperativismo”, señaló Diez.

En cuanto a la operación de la cooperativa, se espera que los internos gestionen las compras y ventas de los productos como en cualquier otra entidad comercial. Los primeros fondos provendrán de donaciones, pero después la cooperativa deberá sostenerse con sus propios ingresos. El almacén solidario también pretende aliviar la carga de los familiares de los reclusos, quienes ya no tendrán que transportar grandes cantidades de productos durante las visitas.

Otro aspecto innovador es que los internos que integran la cooperativa pueden continuar formando parte de ella una vez que recuperen su libertad, si así lo desean. Esta decisión será tomada por los miembros de la cooperativa, que se rige por un órgano de decisión interna, como cualquier otra cooperativa en funcionamiento.

Con este proyecto, Neuquén no solo busca mejorar las condiciones de vida de las personas privadas de libertad, sino también abrir un camino hacia la reinserción laboral y social mediante el trabajo cooperativo. Se espera que esta experiencia pueda replicarse en otras unidades penitenciarias del país.

La defensora Petraglia destacó la importancia del proyecto como un medio para reducir la reincidencia delictiva y mejorar las condiciones de vida de los internos. «El trabajo es un derecho y una herramienta fundamental para la resocialización», afirmó durante la reunión en la que se discutió el avance de la cooperativa.

El inicio de las actividades de «Trabun Mapu» está previsto para finales de este año, con el apoyo de los ministerios y organismos que han acompañado su desarrollo desde sus primeras etapas.

 

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