La presidenta del barrio San Lorenzo Norte, Gabriela Rubilar, fue quien realizó la denuncia y detalló a través de la red social Facebook que había sido acosada por teléfono y por mensajes por un hombre.
Este hecho, según relató la vecinalista, viene ocurriendo hace más de dos semanas. Hasta que durante la noche del viernes y la madrugada sábado pudo identificar al hombre que la acosaba, el cual se llama Damián Moya.
«Me empezaron a llamar desde un número privado y yo atendía las llamadas porque a veces me llaman vecinos o la misma municipalidad, al ser la referente del barrio. Muchas veces se quedaban en silencio y en otras me decía esta persona ‘que hace la presidenta mas linda del barrio’. Sa mi nombre, todo y no podia saber quien era», relató Rubilar.
El viernes, Rubilar junto a jóvenes del barrio, se reunieron a cenar, «hasta que me llamaron de un numero común, atendí y enseguida pregunto si hablaba conmigo, le dije que si y enseguida me entro a decir cosas acosándome. Lo puse en alta voz, los chicos y chicas que estaban presentes escucharon las cosas que me decían pero corte no le di mucho mas tiempo a que siga hablando», expresó.
Luego la presidente de San Lorenz Norte agendó el numero de la persona y dijo que no lo conocía. «Muestro la foto que tenia en WhatsApp y uno de los chicos me dijo que lo conocía y que se llama Damian Moya y trabaja en la política«.
«Cuando el tipo se dio cuenta, me empezó a llamar, continuó al otro día y me mando mensaje pidiéndome perdón. Pero bueno se equivocó, porque nunca le di pie para que me diga esas cosas, yo no lo conozco», agregó Rubilar.
Luego de haber realizado la denuncia a través de una comisaria, Gabriela decidió hacerlo publico en Facebook. «Cuando hice la publicación enseguida empezaron a decir y denunciar otras chicas que también habían sido acosadas por él», sostuvo.
«Quiero que sepa Damián Moya que no ESTOY SOLA. Y Si algún funcionario público, político quiere defender a este Muchacho TAMBIEN SERA DENUNCIADO!!!», concluyó el mensaje en Facebook, Gabriela Rubilar.
